"Otro vendrá que bueno me hará" …esta gran frase tiene su origen en el siglo IV a.c. cuando una anciana de Siracusa rogaba porque Dionisio el Antiguo, cruel tirano gobernador de la provincia, tuviera una larga vida. Y tenía razón, porque cada vez que rogaba a los dioses para que el tirano de turno cayera fulminado rápidamente, y era escuchada, llegaba uno que era todavía mucho peor. Recuerden lo malo y despiadado que se supone que era Ángel María Villar en 2017. El juez Pedraz estimaba que Villar se valió de una red de clientelismo, soborno y presiones con el fin de garantizar su permanencia al frente de la Federación Española de Fútbol. Y le imputaba los delitos de administración desleal, apropiación indebida, estafa, falsedad documental y corrupción entre particulares y justificaba la adopción de medidas cautelares ante "la gran capacidad económica de la que disponen" … Y, a pesar de que el sucesor de Villar, Luis Rubiales, vendió en secreto