En el Tratado de la Comunidad Europea se define como objetivo primordial del BCE mantener la estabilidad de precios en la zona euro. En 1998 el Consejo de Gobierno de la Comunidad estableció la definición cuantitativa de la estabilidad de precios como elemento central de la política monetaria del BCE como "un incremento interanual del Índice de Precios de Consumo Armonizado de la Eurozona inferior al 2%". Y no se llega a esa cifra. La crisis todavía se deja sentir en muchos países comunitarios. La inflación se redujo al 1,2% en mayo, desde el 1,7% de abril. Y eso que los economistas habían pronosticado un aumento del 1,5% en los precios. La inflación subyacente, que excluye los alimentos y la energía, cayó al 0,8% desde el 1,3% de abril y también por debajo de las estimaciones de los economistas de un aumento del 1,1%. Ante este panorama, y, aunque una dinámica salarial positiva debería aumentar la inflación subyacente en la Eurozona a medio plazo, la inflación de